Cuando el CEO de Unapologetic Luxury nos habló del proyecto no había normas ni límites. Teníamos que crear algo único, especial y diferente a todo lo que había en el mercado del lujo. Teníamos que conseguir proyectar un lujo extremo e insolente.
Soberbia se orientaba exclusivamente hacia un mercado oriental, evitando el look barroco y recargado que suele acompañar a todos los proyectos orientados a ese mercado. Debía ser simple en su complejidad.